Por tercer año consecutivo, la Universidad de La Frontera recibió a sus nuevos alumnos de una manera distinta. Atrás quedo la antigua idea de que el ingreso a la educación superior se reducía sólo a cursar una disciplina. Hoy vivimos en un mundo integrado e integral y es fundamental que los estudiantes se inserten de forma exitosa en un espacio que dominará su vida por los próximos 5 años, y que determinará su futuro como profesional.
Coherentes con esta idea, el Centro de Innovación Profesional (CIP) junto a la Dirección Académica de Pregrado ampliaron la cobertura del Programa de Inserción Universitaria (PIU). Este año más de 1.600 estudiantes accedieron a dinámicas que abordaron el apoyo a la adaptación universitaria, fortalecimiento académico, actividades por facultad y extensión universitaria.
“Fue una semana donde los estudiantes de nuevo ingreso pudieron compartir con sus pares no sólo información sobre la carrera, sino también empezar a generar nuevas redes y vincularse de manera efectiva entre ellos”, explica el Director del CIP, Juan José Gutiérrez.
Es así como la orientación de los nuevos alumnos estuvo a cargo de directores de carrera, docentes y estudiantes de los últimos años –todos debidamente preparados a nivel metodológico y empoderados de su rol-, cuyos testimonios son relevantes para conocer diversos aspectos de la vida universitaria.
“Nuestra idea es que los jóvenes se conozcan y que también puedan fortalecer ciertas competencias básicas que son de mucha utilidad al cursar el primer año de universidad”, dice el directivo. Para ello, se diseñó un ciclo de 45 de talleres que fueron impartidos de manera simultánea durante tres días y que abordaron el pensamiento creativo, habilidades comunicativas y expresión escénica. “Es un desafío multi-carrera y multi-facultad, que integra a todos los actores universitarios y es el primer paso para que la universidad deje huella en un profesional”, indica el director del CIP.
Asimismo, la Jefa de División de Orientación y Desarrollo Estudiantil, Carolina Hidalgo, indicó que el objetivo es “instalar desde el primer minuto algunas cosas que van a hacer énfasis en la vida de los estudiantes, razón por la que nos enfocamos en actividades que son fundamentales para la formación profesional”.
La Universidad es Más que Estudiar
Sin embargo, todo este esfuerzo tiene una finalidad mucho más acotada. De acuerdo a los lineamientos establecidos en el Convenio de Desempeño Evoluciona, uno de los objetivos en al área de Procesos de Formación es mejorar tasas de rendimiento, índices de retención y disminuir la deserción temprana.
“Todas las acciones del PIU están enfocadas a generar en los jóvenes sentido de pertenencia, identidad, consolidación de redes, conocimiento del entorno, aquello que los motive a seguir adelante”, señala Juan José Gutiérrez.
Es indispensable que los estudiantes inicien un camino de socialización que a futuro será de mucha utilidad. No sólo es estudiar, es también participar de la vida universitaria, que incluye agrupaciones estudiantiles, tutores, profesores externos, entre otros.
“Necesitamos que la Universidad ‘pase’ por las personas y para eso no debemos olvidar que tratamos con estudiantes con un historial familiar y vida personal, que traen experiencias variadas y que deben insertarse en un contexto completamente diferente, que los formará como profesional y como personas”, finaliza el director del CIP.
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